El proyecto Thermalcond, coordinado por Aimplas, finalizó el pasado enero cumpliendo con los objetivos marcados: el desarrollo de un material termoplástico con mayor conductividad térmica, la fabricación de un recubrimiento novedoso de fácil aplicación que permite aumentar la absorción de la luz solar y el mantenimiento de las propiedades mecánicas de los materiales de partida. Pero todo ello no hubiera sido posible sin la nanotecnología.
La posibilidad de aplicar este recubrimiento sobre tubos plásticos cargados con grafeno, hace que este sistema, aumente significativamente su eficiencia y transmisión de calor. Inicialmente, a escala de laboratorio, se procedió a evaluar los recubrimientos en un simulador solar, obteniéndose aumentos del 80% en eficiencia cuando se compara con un sistema comercial basado en metales.
Este prototipo, se montó empleando tubos plásticos recubiertos. La adherencia del recubrimiento se testeó previamente obteniéndose resultados excelentes.
Prototipo proyecto Thermalcond comparado con un colector solar comercial.
Por otro lado, el recubrimiento de los tubos plásticos, que pueden ser producidos por extrusión, es sencilla, ya que puede realizarse aplicándolo en espray y con un coste aproximado de 2 €/m2, frente a los procesos convencionales.
Otra de las características que hacen tan interesante este recubrimiento es que a pesar de haber sido diseñado para el empleo en el proyecto Thermalcond y por tanto para su uso en poliolefinas, este producto presenta muy buena adherencia en múltiples superficies de distintos materiales, incluidos los metales.
Interempresas - Plastico
07 Junio 2013